El presidente de Brasil, Jair Boslonaro, insiste en un medicamento contra la malaria, hidroxicloroquina, mientras lucha contra el COVID-19.

Dió positivo en la segunda prueba realizada el miércoles, sin embargo, sigue afirmando que se siente bien.

Aunque no hay suficiente evidencia científica de que la hidroxicloroquina pueda luchar contra el coronavirus, el presidente del país sudamericano insiste en promover este medicamento.

“Desde el principio me medicaron con hidroxicloroquina, con la recomendación de un médico. Me sentí mejor al día siguiente. Si es una coincidencia o no, funcionó para mí ”, dijo Bolsonaro en un video de redes sociales.

Es un aliado cercano del presidente estadounidense Trump, otro partidario de la medicina contra la malaria, y el líder del país número uno del mundo que no tiene idea de cómo lidiar con la pandemia.

Brasil está justo detrás de los EE. UU. en cuanto a la cantidad de infecciones y muertes por coronavirus, gracias a las decisiones de su presidente.

Aunque los expertos médicos critican el comportamiento irresponsable del gabinete del presidente, todavía hay algunos que circulan en público sin usar una mascarillas.

Al principio de la pandemia, Bolsonaro se refirió al virus como una “pequeña gripe”, y hasta hoy el país ha perdido 75,568 personas a causa del coronavirus, mientras que 1,972,072 están infectadas.

Después de todo, parece que la “pequeña gripe” es más mortal de lo que las autoridades de Brasil creen.